He sudado, he sangrado, he llorado y lo he conseguido. Pero ahora estoy buscando un reto aún más complicado. Lo intento cada día, después de mil caídas, mil intentos sin victoria. Quiero encontrarme a mí mismo. Creo que ese es el sentido de la vida, o por lo menos, la lucha que libro cada día me hace pensar que es eso. Cada golpe me hace más fuerte y me enseña cómo debo recibir el siguiente. A día de hoy me encuentro peleando contra mis falsos instintos y mis demonios. He vivido creyendo que la vida que llevaba me llenaba con todo lo que necesitaba. He tirado la mitad de mi existencia a la basura. Ahora me posiciono al otro lado del cristal. Pinso que solo me quedarán aproximadamente veinte años de vida y no voy a desperdiciar ni un solo minuto. Quiero exprimir cada aliento. Quiero sentirme vivo. No pienso dejar que nada lo impida. Aquí empieza el resto de mi pida. Aquí lo escribiré con las mejores palabras.
