Si tus ojos fueron mis ojos, sé que estás leyendo esto con la misma intriga que yo tengo por lo que vaya a suceder. El presente es incierto y el futuro una broma de mal gusto maquillada como una puta antes de su próximo servicio. Hay esquinas en mi cerebro que no me gustaría conocer y sigo siendo el último soldado en la línea sin batallón de apoyo. Todo explota a mi paso y es mejor así, ningún vivo quiere saber de mí y solo me comunico con mi arconte en la oscuridad.
Aunque no lo parezca, no tomo drogas desde hace tiempo, o al menos no de las que me gustaría. Aún así sigo siendo un adicto y me regocijo en caricias que ya no existen, en besos que ya no me tocan y en arañazos innocuos que solo suceden en mi imaginación.
Soy mi propio enemigo esperándome detrás de la puerta en silencio. Pienso que en cualquier momento probaré de nuevo el cuchillo afilando mis venas. Cuchillo con el que duermo bajo la almohada por si aparezco en algún momento con pensamientos encontrados.
Si tus ojos fueron mis ojos, sé que miras a través de las personas como yo lo hago, con odio y cautela. Como dos desconocidos en medio del desierto, con una mano en la pistola y la otra saludando mentirosa. No confío en ninguno de ellos por mucho que su aura brille. Es como si viviera preparado para la pelea. Siempre calculando la ofensiva con la altura perdida.
Hubo un momento en el que pudiste decir que era el último ser libre del planeta. Pero ahora todo eso no sirve para nada, pues allá donde miro solo veo carceleros y verdugos. Y prefiero mi celda antes que la vuestra. Por lo menos aquí todo es sincero y nadie me miente, y al que lo hace le espera un juicio rápido y guillotina.
Soy mi propia ley no escrita con la conciencia del que no sabe lo que hace. Poniendo la mano en el fuego por cualquiera solo si realmente merece la pena. Solo por los míos, corrijo. Tú estás fuera. Porque si realmente tus ojos fueron mis ojos en algún momento, sabes que ahora no somos los mismos. Y que veo el mundo como una amenaza continua. No quieras estar delante de mí cuando todo estalle. Pasarás a ser carne muerta en lo que dura un parpadeo.
Yo también pienso que estoy loco.
